EL AMOR EN LA CARTA ASTRAL

Una de las cuestiones que más interesan a quien solicita una consulta astrológica, es saber cómo tiene el amor en la carta astral. Es una necesidad universal que en mi trayectoria como astróloga he tocado muchas veces, y un tema agradecido de tratar en un carta astral. Bueno, lo de agradecido es un decir, pues no siempre el amor aparece en una carta como nos gustaría. La mayoría de veces, para ser sincera, me encuentro una serie de intentos bastante parecidos al clásico "ensayo y error", hasta dar con la pareja apropiada.

Hay aspectos en la carta astral que parecen allanar el camino, en cambio otros parecen poner las cosas complicadas. Lo que sí aparece en todas las cartas astrales, es el tipo de persona que nos atrae y el tipo de persona con el que podríamos entablar una relación duradera y más o menos satisfactoria. Digo más o menos, porque en la carta astral también se ve que hay personas que atraen relaciones insatisfactorias, y las mantienen. Y eso obedece a razones a veces muy profundas, que hacen que algunas personas se sientan bien manteniendo relaciones complicadas. ¿Qué es, pues, lo que determina el tipo de amor o de relación amorosa que necesitamos? 

Los aspectos astrológicos del amor

Analizar toda la cuestión amorosa en una carta astral es, en realidad, un encaje de bolillos. Para empezar, hay personalidades más amorosas que otras. Aquellos que tienen una predominante del elemento Agua en su carta astral son personas con necesidad de conexión y expresión emocional. Cáncer, Escorpio y Piscis son los tres signos vinculados al elemento Agua, y es el reparto de planetas en estos signos ( no sólo el signo solar) el que da esta dominante emocional. Los signos de Tierra y Fuego necesitan más una relación física satisfactoria, y los de Aire se sienten bien en relaciones con un buen intercambio a nivel comunicativo. Es de esperar que cuando planetas como Sol, Luna, Ascendente o Venus caen en un determinado elemento, marquen una dominante, en especial si al menos dos de estos indicadores están en el mismo elemento. 

Las relaciones entre estos planetas también nos darán una idea bastante aproximada de cómo es una persona en el amor. No sólo se reduce a los elementos donde están, sino también en qué casas y signos están, y cuál es la relación entre ellos. A veces, al levantar una carta natal, sorprende ver cómo personas que aparentemente lo tienen todo para ser amadas (belleza, inteligencia, salud, dinero), muestran en cambio grandes dificultades para encontrar pareja. Es el caso de la carta astral de Camilo Sesto, donde una cuadratura Venus-Saturno le estaba marcando su dificultad en el amor. En muchas otras celebridades bellas y exitosas encontramos este aspecto Venus-Saturno o Luna - Saturno que no favorecen los asuntos amorosos. 

En general, los buenos aspectos entre Sol, Luna y Venus predisponen a la felicidad amorosa. Normalmente, las personas que tienen estos planetas bien aspectados entre sí poseen una personalidad o físico atractivos, una buena sociabilidad y un carácter que en general se gana la estima de quienes les tratan. No es fácil en estos tiempos encontrar a alguien que presuma de haber tenido suerte en el amor, pero no se me ocurre nadie mejor como ejemplo que Isabel Preysler, a quien se le llegó a apodar "la reina de corazones". 

¿Qué hay de especial en la carta astral de Isabel Preysler, que explique su suerte en amor? Un Venus dignificado, bien situado y con buenos aspectos. Está en el punto más alto de su carta, exaltado en signo de Piscis (Agua) y en conjunción con Marte, Júpier y el Nodo Norte. La conjunción de Venus con el Nodo Norte da para un tema entero, indicando una mujer que estaba predestinada para el amor, o el amor para ella. Esto explica que nunca haya estado sola. Por si fuera poco, un trígono entre Venus y Luna acaba de completar una serie de buenos aspectos amorosos que hacen de esta persona una indiscutible triunfadora en amor. Un amor en todos sus aspectos, ya que un buen aspecto entre Luna y Venus favorece un buen carácter, una personalidad afectuosa y muy apreciada por aquellos que la tratan. 

La conjunción Venus-Júpiter es una de las más afortunadas en astrología, pues estos dos planetas se les conoce en astrología tradicional como las dos fortunas. Si a estos planetas los unimos en una conjunción, en lo alto del cielo, en el signo de exaltación y con una conjunción de Marte que refuerza el atractivo sexual... El resultado es una persona tan afortunada en el amor que, como en su caso, puede llegar a alcanzar la fama, el éxito y la prosperidad en base a su belleza y encanto. Venus en Piscis, independientemente de los aspectos que haga, suele dar mucho encanto tanto a hombres como mujeres, aunque más a estas últimas. 

Las mujeres son de Venus, los hombres de Marte

En una carta astral hemos de tener en cuenta también el género al que pertenecemos o pertenece la persona que solicita su carta astral. No es lo mismo ese Venus fantástico de la carta astral de Isabel Preysler, que es mujer, que si esa misma carta fuese la de un hombre. En tal caso, nos hablaría del tipo de mujer que ese hombre atraería o por la que se sentiría atraído. Por lo general, Venus representa al arquetipo femenino y Marte al masculino. Es de esperar que un hombre viva su Venus a través de una mujer, y no tanto en primera persona. 

En el caso de un hombre artista, un Venus tan bien aspectado como el que hemos visto le daría  talento y fama artística, por ser Venus un planeta vinculado a la belleza y al encanto. Igualmente le atraerá mucha compañía femenina. En el caso de la Luna, pasa más o menos algo similar: es el planeta que afecta más a las mujeres en una carta natal, pero también aporta mucha información acerca de la vida sentimental de un hombre; la Luna tiene que ver con la madre, la esposa, el hogar y los sentimientos. En las relaciones estables, hemos de mirar cómo está nuestra Luna, porque ella nos dará la base emocional. 

El amor en la carta astral no siempre aparece de una forma tan rotunda como en este ejemplo. Lo normal es que en el estudio de una carta astral aparezcan épocas buenas y malas, relaciones que no funcionan y otras que fluyen como la seda (para esto hay que echar mano de otra técnica astrológica llamada sinastría), almas gemelas, afines o incompatibles. Incluso también se puede ver la soltería en la carta astral, a lo que dedicaré una entrada en el blog en otro momento. En breve, el tema del que hablaré será el eclipse solar de junio, que va a ser importante y significativo para todos, en estos tiempos tan especiales que vivimos de cambio profundo global.